martes, 26 de mayo de 2009

Juan Carlos Asco.

Se trata del asco.
Asco es una palabra fuerte, grave en su acentuación, resulta que no lleva tilde porque las palabras graves terminadas en N, S o vocal, no llevan tilde. ¿Y quién lo dijo? Juan Carlos Asco, que seguro lo decidió en su oficina de Puerto Madero, mientras su secretaria (probablemente rubia y tetona, con algo de colágeno en los labios) le servía un licuado de banana con leche. Porque parece que Juan Carlos Asco no quiere olvidar su pasado popular.
Y se trata de que nos de asco, todo esto, que nos produzca náuseas.
Ocurre que leí un post de un amigo, al que le tiraron una piedra en la cabeza (que se abrió y sangró por un buen rato, hasta que un médico de guardia le tiró una onda y le cosió unos puntos) solo por ser gay.
Sí, por ser gay y estar abrazándose con su novio, tranquilo en la calle. Por decidir vivir su vida, por abusar de la libertad. Porque nosotros, los putos, gays, homosexuales, o como más te guste llamarnos... tenemos una libertad condicionada.
Somos graciosos, y tenemos que ser inteligentes y ácidos, pero recibimos miradas violentas, que nos reprimen, cuando queremos comentar lo que hacemos en casa, con la persona que amamos... "la vida privada, adentro de la casa", comentan mientras cuentan cómo sus parejas heterosexuales lxs complacieron por la noche.
Nos vestimos bien, sabemos convinar los colores, pero se nos reprueba cuando comentamos sobre el pullover que nos compró algún novio. Shhh, te lo regaló un amigo ¿sí? No me hagas quedar mal.
Nos gusta el buen cine, y vamos a la ópera, somos claramente más cultos que un hombre heterosexual, pero seguro que no podemos arreglar un caño roto, o una fuga de gas. Menos que menos jugar al fútbol, no sea cosa que en el vestuario nos tentemos y le toquemos el miembro al novio de María.
Somos tantas cosas, tanta porquería.
No seas maricón; te van a romper el orto; y?? siempre solo, vos... cuándo vas a traer a tu novia?; está todo bien con los putos, eh?? yo no discrimino; ese que pasó era un puto!; son todos putos los borrachos del tablón; policía puto; puto, trolo, marica, loca, comilón, tragasables, y así también: torta, camionera, machona, marimacho, machoman, travesaño, trava, trapo.
Y a mí todo esto me da tanto, pero tanto, pero tanto asco.
Que tal vez en algún momento me sorprenda, y pueda caminar de la mano, contento, disfrutando un día de primavera.

1 comentario:

santi dijo...

Me había puesto contento que volviste a publicar cosas en tu blog, chusmié algo de tu sueño y cuando entreleí "homosexuales" por ahí me acordé cuando me dijiste que algo habías escrito (lo que no me imaginé en ese momento es que lo habías publicado y en este blog).
La verdad es que del sueño que soñabas me despertó un baldazo mío.
Ojalá el balde hubiese estado vacío, ese flaco hubiese agarrado por otra calle, nosotros hubiéramos seguido hasta la puerta de casa.
Ahora igual ya está. Me sacaron los puntos. El pelo crece. La sangre sale de la ropa con agua fría.
Pero la verdad es que cada vez que escucho algo homófobo, me molesta mucho más.
¡muerte al placard!

un gran abrazo.